Graciela Santos Gómez… bordadora de sueños.

Las mujeres oaxaqueñas se caracterizan por ser grandes emprendedoras, pero las zapotecas son especialmente laboriosas y excelentes comerciantes.

Desde los tiempos milenarios del Anáhuac, las mujeres zapotecas se han caracterizado por ser excelentes emprendedoras, no solo para proveer el sustento de los hijos y la familia, sino en defensa de la cultura, la identidad y el territorio.

Pero algo que identifica a las mujeres de todo el Anáhuac es que han sabido combinar “virtuosamente” lo familiar con lo comercial, es el caso de las mujeres zapotecas de Santo Tomás Jalietza, y en específico, de una artista, creadora y diseñadora de ropa que se ha hecho por sí misma. Aquíoaxaca la entrevista para usted.

“Soy Graciela Santos Gómez, mi negocio se llama “Artesanías el Ángel” y llevo siete años en este sueño. Todo surgió por el deseo de trabajar y en espacial el diseñar, bordar y sobre todo el uso de colores.

De niña aprendí a trabajar el telar de cintura que es lo tradicional, pero es muy cansado, a mi me gusta más diseñar y bordar.

Yo no sabía dibujar y empecé a hacer unas blusas muy sencillas y a bordarle gatos…como los que se hacen en la escuela, con dos bolitas y una carita, pero la gente decían que eran ratones, pero les gustaban.

Pero ahora la práctica hace al maestro. Ya he mejorado mucho el dibujo. Primero dibujo y luego bordo. El deshilado es un trabajo muy complejo y requiere mucha concentración.

Yo hago blusas e incluso hago vestidos de novia. Yo no estudié corte ni nada que se le parezca. Cómo salen los cortes…no lo sé, pero me salen desde adentro del corazón, es como un sueño.

Yo diseño ropa para quinceañeras, para las muchachas que salen de “La América” o vestidos especiales que la gente viene a pedirme. Le vuelvo a repetir, yo no estudié corte o diseño. Y cómo saco los trazos, ni yo misma me lo explico.

Cuando hago un vestido de novia, me lo encargan, me dicen más o menos cómo lo quieren y me enfoco en él hasta verlo terminado. Me apasiona eso de estar, dibuja, dibuja y dibuja la manta, porque eso es lo que me gusta.

Tengo dos hijos, un niño, de siete y una niña de dos, mi esposo es obrero y trabaja en Ocotlán, así que el negocio lo llevo yo sola. A mí me gustaría tener un local más grande con exhibidores y con amiquíes.

Luego disfruto mucho el estar combinando colores. Yo los corto, los dibujo, los bordo y los armo. Luego se lavan y se planchan y se ofrecen a la gente en mi tiendita.

La gente de la república y de Oaxaca es la que más me compra. Ahora las mujeres se animan a usar nuestra ropa. Invito a que vengan a Santo Tomás Jalietza y en especial a conocer mi trabajo. Estoy aquí frente al Mercado de Artesanías.

Cuando vengan a Ocotlán y pasen a Santo Tomás Jalietza, me daría mucho gusto que me visitaran y que conocieran mi trabajo. Soy una mujer que tengo sueños que con mucho esfuerzo los estoy convirtiendo en realidades.