EL PATIO

En medio del Valle Sagrado de Tlacolula camino a la zona arqueológica de Mitla, frente al inmenso caimán convertido en montaña. Rodeado de lugares antiguos y mágicos como son las zonas arqueológicas de Dainzu y Yagul, así como el cerro de Macuilxochitl, el cerro de las Nueve Puntas. Muy cerca el laborioso pueblo de Teotitlán del Valle y la cabecera distrital de Tlacolula de Matamoros, se encuentra un espléndido sueño producto del empeño por revalorar la cultura oaxaqueña.

En efecto, pocos restaurantes en Oaxaca han cuidado desde su creación, un virtuoso equilibrio entre el paisaje, la arquitectura popular mexicana y la variada cultura culinaria que hace del "Restaurante El Patio", un lugar exclusivo para aquellas personas que buscan tocar en lo profundo el murmullo del hechizo de la comida oaxaqueña.

Con más de una década de servir a las paladares mas exigentes, El Patio le ofrece una verdadera aventura para sumergirse en lo profundo de la cocina oaxaqueña y entender el por qué, en el mosaico multicolr de la gastronomía mexicana, Oaxaca ocupa un lugar muy especial.  

La cocina oaxaqueña hunde sus orígenes miles de años antes de Cristo. Recientes investigaciones afirman que en el Valle de Tlacolula, se han encontrado muestras de Teozintle más antiguas que las del Valle de Tehuacán, Puebla, el pasto que fue modificado por los Viejos Abuelos para convertirlo en el maíz. De este modo la cultura ancestral de los oaxaqueños se vió enriquecida con la cultura culinaria de los europeos, que a su vez, la habían tomado de Asia, especialmente de China y de la India. Oaxaca es un crisol del sincretismo cultural de propios y extraños, especialmente en la cocina.

El Restaurante el Patio le ofrece la armoniosa combinación de la arquitectura, la cocina y la cultura popular oaxaqueña. Sus amplios corredores y luminosas paredes blancas le brindan una cuidadosa selección de objetos, utensilios y piezas del arte popular que recrean los ojos y exaltan el espíritu. Manos sensibles que transforman la materia y le dan significados diversos del universo humano.

Una serie de pequeños detalles que revelan muchos años de paciente búsqueda de piezas que mantenga una temática en torno a la creatividad y sensibilidad en el terreno del arte popular. Visitar la capilla del restaurante y apreciar la fiel reproducción de la Virgen de Juquila, es penetrar el mundo espiritual de esta ancestral tierra.

El buen gusto, el sazón de las cocineras y la atención esmerada del equipo de jóvenes oaxaqueñas le harán inolvidable su experiencia en el centro del Valle Sagrado de Tlacolula y seguramente que la comida en el Patio se sumará a las muchas sensaciones de goce estético y humano que hacen de OAXACA LA RESERVA ESPIRITUAL DE MEXICO.

Conocer el Valle Sagrado de Tlacolula; visitar Mitla, Yagul, Dainzú, Teotitlán, Santa Ana del Valle, Tlacolula y comer en el Restaurante El Patio seguramente que será una experiencia inolvidable que acrecentará el gusto y el amor a la cultura "propia-nuestra".

El Restaurante el Patio ofrece a los visitantes algo diferente. Su filosofía es que la comida no puede estar desvinculada del entorno que la ha creado a través de los siglos. La arquitectura, el arte popular y la naturaleza se conjugan armoniosamente para que los seres humanos a lo largo de los siglos desarrollen su sensibilidad y logren plasmar en sus alimentos y su habitat, su particular forma de entender, el mundo y la vida, así como su relación intima con la naturaleza.

Un pequeño jardín botánico, con las plantas más representativas del valle, le permitirán gozar la sensación de espacio y luz que se siente en las amplias instalaciones que nos remiten a los antiguos cascos de la hacienda mexicana.

 

Comer en una atmósfera típicamente oaxaqueña, entre grandes corredores bañados de luz y bajo pesadas vigas con techo de carrizo, es regresar a la esencia, a la raíz de nuestras más profundas tradiciones. La mesa esta puesta para usted: